3 principios para los negocios del futuro: ¿cómo adaptarse?

La mirada tradicional de la creación de negocios y empresas responde a la lógica: planeo + consigo presupuesto o inversión ($) + adquiero activos + contrato empleados + ejecuto + triunfo (¡o me sorprendo con un resultado catastrófico!)

Esa lógica está tan incorporada en nuestra formación que desconsideramos y muchas veces negamos asertivamente la existencia de otras posibilidades.

En esencia, debemos recordar que un negocio consiste en un proceso repetitivo de generación de valor a otros actores y captura de valor.

Los negocios del futuro son colaborativos, humanos y stakeholder-centric: los actores toman un rol central en cuanto a la información que generan para sustentar las decisiones. Trabajan con modelos de negocio dinámicos y flexibles y no con planes rígidos de largo plazo. Priorizan la experimentación, medición y aprendizaje sobre la ejecución de presupuestos. Se apoyan en aliados y terceros y tienen un fuerte componente de financiación sostenible, por medio de los mismos actores, clientes y proveedores.

En este contexto, sugiero 3 principios que en mi criterio toda compañía que quiera adaptarse al futuro debe seguir:

1. Matar la idea

Es fundamental abandonar las certezas y la noción de tener la verdad sobre la industria y reemplazar el “nosotros sabemos” por la escucha del cliente. “No se trata de tener o ejecutar grandes ideas, sino de validar, en cercanía con los actores del negocio, cómo generar, entregar y capturar más valor de forma repetitiva. Debemos comprender que las innovaciones más poderosas no son siempre de productos o servicios ni requieren necesariamente tecnología.

2. Reemplazar los planes de negocio por modelos de negocio

Como menciona Steve Blank, padre del emprendimiento moderno: “El plan de negocios no sobrevive al primer contacto con el cliente”. Entonces: ¿Por qué ejecutar con confianza un documento lleno de hipótesis (o adivinanzas) que representa solo una foto desde un momento del tiempo?

Las nuevas metodologías construyen desde los modelos de negocio, que se centran en los actores del negocio, describiendo cómo se genera, distribuye y captura valor. Permiten formular y dar visibilidad a las hipótesis, que luego serán validadas con experimentos simples y escucha. En efecto, gran parte de la ola de innovación tan poderosa que estamos experimentando está basada en disrupción de modelos de negocio.

3. Redefinir el rol del riesgo y la inversión en el contexto actual

La pandemia expuso las limitaciones de los modelos de negocio rígidos. También premió a las empresas que lograron adaptarse y a quienes supieron innovar a tiempo. Es que el modelo de organización que aún replicamos fue creado para maximizar la eficiencia en un mundo que mantenía la ilusión de estabilidad. Hoy, las empresas del futuro priorizan la flexibilidad y adaptabilidad a la eficiencia, los nuevos negocios y oportunidades a las barreras que impone mantenerse en una misma industria o basados en un solo producto.

Con el avance exponencial de las tecnologías, se quiebra gradualmente la lógica de la inversión en activos como barrera de entrada. La tercerización pasa a jugar un rol muy importante y las elevadas estructuras de costos fijos pueden poner en riesgo a una compañía frente al próximo shock o cisne negro.

Agradezco enormemente que me acompañen en este newsletter. Cierro como cada edición con un pequeño video o fragmento de podcast reforzando algunas de las ideas del artículo.

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